14/12/12

El juicio por jurado es muy costoso

El juicio por jurados es un despilfarro económico

El juicio por jurados es muy costoso. De hecho, es el más caro de todos los sistemas de juzgamiento existentes.

En primer lugar, hay que tener en cuenta un gasto "base", por llamarle de algún modo, que han sido los simulacros publicitarios, la preparación de software, los libros y materiales instructivos, la depuración del padrón electoral, el personal específico para hacer funcionar el sistema y muchas cosas más que ha significado un número sideral (cientos de millones de pesos).

Y por supuesto, la adaptación de todas las salas de audiencias de la provincia (para que puedan albergar tanta gente) y la creación en todos los tribunales del espacio físico donde el jurado pueda permanecer mientras no haya juicio y pueda deliberar para dictar su veredicto.

Después hay que considerar lo que le podemos llamar un gasto "oculto" que está relacionado a la notificación de no menos de 48 jurados por cada juicio, que hay que duplicar en caso de que no comparezcan (lo que ocurre muy a menudo), y toda la infraestructura para hacer eso con cada debate.

Por último, existe un gasto "visible" que es el que se produce en la realización propia de cada audiencia de juicio.

La ley estipula, en carácter de compensación diaria, una determinada suma de dinero para cada jurado equivalente a dos jus. Siendo 18 los miembros del jurado (12 titulares y 6 suplentes) se produce una erogación extra de aproximadamente un sueldo mensual de juez por cada juicio que se realiza. Es decir, por la misma suma de dinero que un juez realiza varios juicios orales, el jurado sólo realiza uno. Pero el sueldo del juez no se ahorra: tan sólo se suma el gasto del jurado.

A esto se debe adicionar el costo de alojamiento de los miembros del jurado cuando ellos provengan de otro departamento judicial. Los gastos de transporte y manutención previstos en la ley para los jurados que no tienen medios. El costo de la custodia y seguridad, que va a requerir programas de protección a los jurados.

El juicio por jurados cuesta mucho, hay que poseer una estructura administrativa que no existe, se debe dotar a los fiscales de facultades y presupuestos que no tienen, hay que ampliar edificios y crear una logística que no se tiene. En suma, el gasto extra por año es equivalente al costo de un barrio de 100 viviendas, es decir, 100 nuevas familias cada año podrían tener vivienda propia si se ahorrara en juicio por jurados.

Alguien dirá: el costo es importante, pero hay que ver los beneficios... ¡Y ahí está el problema! El juicio por jurados encima que es caro, es inmensamente peor. Se paga más para perder calidad en la justicia penal. Cada peso que se invierte en juicio por jurados es un peso tirado a la basura o al inodoro.

La pérdida de calidad en la administración de justicia se aprecia en dos aspectos: 1°) en primer lugar, porque la labor del jurado siempre es más proclive al error judicial que la realizada por un juez letrado, y 2°) porque en el afán de ahorrar dinero y no tener que afrontar los altos costos de realizar una audiencia en varias jornadas, con el consecuente pago de hotel, viáticos, retribución y comida, las leyes procesales imponen a los jurados realizar juicios en jornadas agotadoras y extensísimas, que además de transformarse en una tarea inhumana, se obtiene como resultado que el jurado —a pesar de la enorme responsabilidad de resolver sobre la libertad del imputado y los derechos de las víctimas— no logra por cansancio y falta de concentración, prestar atención y entender gran parte de lo ocurrido en el debate.

Todo contribuyente que pague más por algún servicio (en este caso, el servicio de justicia), pretende obtener algún beneficio. Lejos de obtener alguno, con el juicio por jurados el ciudadano recibe 10 perjuicios, más otros 10 perjuicios y además colapsa la administración de justicia.

No hay comentarios:

Publicar un comentario